UN PATRIOTA OLVIDADO EN LA MEMORIA HISTORICA CUBANA

Silvestre Pérez de la Hera, farmacéutico y médico Cubano, grande por la bondad y la cubanía, notabilísimo patriota, de carácter jovial y de valor rayando a la locura, nació el 31 de diciembre de 1817, en San Antonio de los Baños, provincia de la Habana. Cursó los estudios primarios en su ciudad natal. El 13 de agosto de 1836 se graduó de Bachiller en Filosofía en la Real y Pontificia Universidad de la Habana, según aparece en el archivo de dicha casa de altos estudios en el expediente 10, 252 antiguo 10707. Se titula en farmacia en la Real Junta Superior de la Isla de Cuba, el 22 de marzo de 1838, con solo 21 años de edad. En 1851, Pérez de las Heras, en unión del arquitecto Manuel Galeano dan el grito de independencia en San Antonio de los Baños y Ceiba del Agua, para levantar a los patriotas cubanos y ayudar a Narciso López que acababa de desembarcar de Pinar del Río Su patriotismo no le permitía distinguir todavía entre anexionismo e independencia. Por aquel gesto de rebeldía ambos patriotas: Silvestre y Manuel, fueron procesados y sentenciados a dos años de prisión en la fortaleza de la Cabaña. Después de  diez y ocho años de aquella aventura y haber cumplido condena por su apoyo a la causa anexionista pasó a residir en Calabazar de la Habana, donde se desempeñó como médico y farmacéutico. A partir de 1868, después del estallido emancipador del Ingenio Demaguaja y ya esclarecido en sus ideas abrazó la causa independentista. En esta localidad se une al cura Rafael Sal y Lima, Párroco de la Iglesia san Juan Bautista, de este pueblo, enrolándose en una amplia conspiración que se proponía levantar en armas a los patriotas del occidente. Descubierto el movimiento por las autoridades coloniales, la mayoría de los conspiradores fueron detenidos el 22 de febrero de 1869, encarcelados en la Cabaña y deportados  a Fernando Poo*, en el vapor San Francisco de Borja.

El comerciante inglés John Holt, nacido en un pueblo del condado de Lincolnshire en 1841, John Holt en su diario testimonio señala que “…el 22 de mayo de 1869 arribó al puerto el «San Francisco de Borja» trayendo 250 «exiliados políticos enviados aquí por el Gobernador General Dulce». Tras afirmar que el viaje había durado 66 días reconoce que había sufrido «algún retraso» por avería en las máquinas, deteniéndose en Puerto Rico; que 20 ó 30 de ellos son gente muy rica, comerciantes y finqueros y entre ellos un banquero cubano…,.”

«¡Pobres cubanos!… separados de sus familias, de sus hogares, de su país, y enviados a un país como éste. Dice John Holt en su diario.

MUERTE DE UN  PATRIOTA

De la experiencia de estas primeras deportaciones contamos con otros testimonios, tal es el caso  de Francisco Javier Balmaseda, el hombre quien, tras lograr escapar de la isla, escribió “Los confinados a Fernando Poo. Impresiones de un viaje a Guinea” (1869). En su autobiografía, Balmaseda denuncia el destino a muerte al que los deportados cubanos fueron condenados por las autoridades españolas: “La confinación a Fernando Póo es una pena idéntica a la muerte, tal vez peor…”.Debido al clima mortífero y la insalubridad y calamidades reinantes en esa isla, estas deportaciones eran una condena a muerte: “Unos cuantos años de presidio en Fernando Póo serían de seguro una pena de muerte a cortísimo plazo/.

En torno a la fecha de fallecimiento de Perez de las Heras existen discrepancias.El historiador Lauzano dice que Silvestre falleció en el hospitalillo de Fernando Poo, víctima de la malaria, el 3 de julio de 1869, y enterrado en el cementerio católico de Santa Isabel de ese lugar. El periódico “la Revolución”, de N. York señala que él muere el 29 de junio de 1869.  A pesar de esta imprecisión, lo cierto es que él dejó un profundo ejemplo en la historia  de La Habana y de Cuba.

CONCLUSIONES

El médico cubano Silvestre Pérez de las Heras representa el profesional de ética y pensamiento libre que como tantos otros a lo largo y ancho de la Isla integro esta pléyade de luchadores por la independencia nacional cuyos nombres ha permanecido en el anonimato hasta nuestros días. El hombre que abrazo inicialmente la causa del anexionismo y que evoluciono hacia las posiciones del independentismo a partir del alzamiento de Damajagua, aquel 10 de octubre de 1868 . A pesar de los anos de lograda la independencia nacional pocos historiadores han dado a conocer  hasta hoy la vida y  rol de este patriota en la Historia de Cuba, este ha sido el propósito del presente  artículo.

CITAS Y NOTAS