ESTANCIA DEL GENERALISISMO MAXIMO GOMEZ EN BEJUCAL

25.10.2016 20:43

Septiembre 1899, estancia del General Máximo Gómez en Bejucal.

 Este trabajo se publica gracias a la amable colaboración de nuestro colega, el investigador Oscar Sánchez Arencibia, de la Ciudad de Bejucal, A él nuestro agradecimiento más sincero. Prof. Eduardo Milian

Por: Oscar Sánchez Arencibia.

Con el fin de  la Guerra de independencia  y la posterior entrada a la Habana del  heroico Ejército Libertador el  24 de febrero de 1899, el General Máximo Gómez  algo extenuado y enfermo, establece su residencia junto a familiares y amigos en la Quinta de los Molinos. Transcurrido algún tiempo, en los primeros días del mes de septiembre del propio año 1899, el General Gómez en unión de sus familiares se traslada a la ciudad de Bejucal, con el objetivo de organizar los preparativos para la exhumación de los restos del General Antonio Maceo y Panchito Gómez Toro., enterrados en la finca La Dificultad en el Cacahual, por orden del Coronel Juan Delgado González y custodiado celosamente por el campesino Pedro Pérez y sus hijos Romualdo, Leandro y Ramón. Su estancia que fue alrededor de un mes y veinte y ocho días, en la casa No 42 de la calle Luna (hoy Calle10) frente a la Plaza de Armas, propiedad de Doña Beatriz Domínguez.  

En todo este tiempo en que el General permaneció en la localidad participa en numerosas reuniones celebradas en el ayuntamiento de Bejucal, junto al alcalde y concejales, organizando una Comisión Popular la que se encargaría de recaudar el dinero necesario para la construcción del panteón donde se guardarían los restos mortales del General Antonio Maceo y Panchito Gómez Toro. “El señor presidente manifestó que a muy corta distancia de esta población se hallan inhumados los restos del Mayor General Antonio Maceo y del Teniente Francisco Gómez Toro, en el sitio en que se encuentran los citados restos debe levantarse un panteón provisional hasta que aquellos sean trasladados al lugar en que deben guardarse definitivamente, que a la honra que dispensa a esta ciudad el General Máximo Gómez eligiéndola   para la realización de los trabajos encaminados a la construcción de dicho  panteón debe corresponderse facilitando cuantos medios sean necesarios.” (1)

Concluido los preparativos para los trabajos de exhumación, la comisión aprueba que el domingo 17 de septiembre seria el día fijado, por ello desde muy temprano en la mañana comienzan a llegar a Bejucal numerosos visitantes en carruajes o a través del ferrocarril, concentrándose frente al Nuevo Liceo en espera de que

1.   

comience la actividad concerniente a la exhumación. ”Las calles estaban muy concurridas. Las coronas se situaron transitoriamente en el escenario de esta institución, en cuyo telón  de  fondo estaban las banderas cubanas y  dominicanas  y  retratos   de  Maceo, Gómez, Martí y Calixto García. A las 9 am  desfilaron ante el Liceo  300 hombres del Regimiento Goicuría comandado por el Coronel  Rosendo Collazo.” (2)

Al mediodía partió la peregrinación rumbo al Cacahual, al frente de la gran marcha iba el Mayor General Máximo Gómez acompañado del alcalde de Bejucal Dr. Isidro Zertucha y concejales del ayuntamiento, también estaban presente los Generales José Lacret Morlot,  Pedro Díaz y  José María Rodríguez, así como  Salvador Cisneros Betancourt  y Juan Gualberto Gómez entre otros.

Ubicada la comitiva en la casa del campesino Pedro Pérez dueño de la finca La Dificultad en el Cacahual, se procedió a la búsqueda y exhumación de los restos en el lugar donde estaba la sepultura por una brigada de trabajadores de sanidad, dirigida por el capataz Agustín Rodríguez Abreu y asesorado por el Dr. Carlos de la Torre Huerta, ante el notario publico Gaspar Barona y Acosta quien tomo acta de lo ocurrido.” Habiéndose procedido a cavar la tierra  en el lugar indicado, a una profundidad de cinco cuartos y siendo la una menos doce minutos de la tarde fue encontrado el primer hueso de persona humana y continuando el registro se encontraron dos osamentas completas que debidamente reunidos y colocados cuidadosamente y con la debida separación quedan en poder de la comisión técnica que ha de dar su dictamen y procederse después a su colocación en los osarios correspondientes”. (3)

 Después de una larga y extenuada jornada de trabajo se decidió que al día siguiente los restos fueran limpiados y analizados cuidadosamente. Esto obligo a la familia y al propio  General Máximo Gómez regresar a Bejucal donde permanecieron hasta el siguiente día que regresan nuevamente al Cacahual.

Como a las diez menos veinte de la mañana continúan los trabajos de exhumación, ” la Sra. Madre y hermana de D. Francisco Gómez Toro abre el hule que contiene los restos de este y que se encuentra atado por dos ariques que se entregan al Mayor General Máximo Gómez”. (4)

2.   

Terminados los trabajos de identificación antropológica por los Doctores Luis Montané y José Rafael Montalvo, los restos  son depositados en dos osarios de plomo los cuales miden cincuenta y cinco centímetros de largo y treinta y uno de alto, colocados dentro de una caja de madera cada uno los que fueron llevados a la casa del campesino Pedro Pérez donde permanecieron en Capilla Ardiente hasta el día 8 de diciembre del propio año en que fueron inhumados en el mausoleo que al efecto se construyó en el mismo lugar donde estuvieron enterrados. ” Se dio cuenta en una comunicación del Mayor General Máximo Gómez y de la comisión popular invitando al ayuntamiento a la inhumación de los restos del Lugarteniente General del Ejercito Libertador Antonio Maceo y su ayudante  Capitán Francisco Gómez Toro, cuyo acto habrá de verificarse el día  ocho del entrante mes de diciembre.” (4)

Durante este tiempo que estuvieron  en capilla ardiente los restos del General Antonio Maceo y su ayudante, el Generalísimo se establece en la ciudad de Bejucal desde la segunda quincena de septiembre hasta finales de octubre, prueba de ello lo es cuatro cartas que el General escribiera desde esta ciudad a compañeros de armas. (Anexos).

En la actualidad se conserva la casa donde vivió el General, a pesar de presentar algunas transformaciones constructivas, en la misma existe una tarja de mármol, que fue montada el 19 de noviembre de 1937 por estudiantes de la Escuela publica, en homenaje a la presencia del Generalísimo en esta localidad. En el museo municipal, se conserva un farol de carburo perteneciente al coche que usara el General durante su estancia en Bejucal, así como un cornetín que perteneció a las fuerzas insurrectas que un 13 de enero de 1896 entraran en a esta localidad.

Citas

(1)   Acta Capitular. Agosto 25 de 1899.

(2) Periódico El habanero. 17 de septiembre de 1999. p: 5

(3) Acta de Exhumación de los restos del General Antonio Maceo y Panchito Gómez  Toro. 17 de septiembre de 1899, Copia p: 3

(4) Acta de Exhumación de los restos del General Antonio Maceo y Panchito Gómez  Toro. 17 de septiembre de 1899, Copia p: 5

(5)  Acta Capitular. Noviembre 24 de 1899.

 

 

 

 

 

 

Fotogalería: ESTANCIA DEL GENERALISISMO MAXIMO GOMEZ EN BEJUCAL